Enfoque de Domingo
Amanece un hermoso y radiante domingo de septiembre, un sol vibrante, una mañana fresca que invitaba a disfrutarla, las ganas de fotografiar latentes, son de esos días de fin de semana de salir y ya, a ver con que nos conseguimos allá afuera, son esas ganas que no puedes contener, por más que intentes concentrarte en hacer otra cosa, es allí donde va tu corazón. Decida y preparada mentalmente que voy cámara en mano, es todo un complejo entedimiento entre lo que quieres hacer y lo que puedes hacer, decidí en esta oportunidad por lo que quiero hacer y salgo. Una vez afuera recorrer el entorno, ver como amanece la ciudad, quienes circulan, empezar a mezclarte en ese todo, tan basto que a veces sientes te intimida, y allí iba, esperando momentos, caminando, observando, capturando momentos, colores, formas, personas, distintos andares, cada escena deja algo, dice algo, te explica algo o simplemente te muestra a ti mismo desde otra perspectiva, sin duda alguna, la cámara como herramienta reveladora a través de la luz, es tan literalmente perfecta, no se equivoca con lo que manifiesta. Esa conexión en cada captura, dejan un sabor especial en el cuerpo, se exterioriza hasta en la forma de caminar una vez que la tienes, es algo único y especial. A mitad de recorrido decido ir a desayunar, cachapa fue la elección, en ese lugar donde las venden tan sabrosas, decido seguir caminando y disfrutar mis alrededores con cada suspiro, cada vista a ese azul de mi tierra que me llena de energía, comenzaba a apretar el calor pero seguía disfrutando el momento, llegué al lugar donde compré la cachapa, gente muy amable, trabajadora eso si, muestran su agradable
atención al percibirme allí, retiro mi cachapa y decido comerla
caminando, cada mordisco en compañia de aquel cielo y el sol en todo su
esplendor se encargaron de crear una mezcla de sensaciones en donde sólo
dar gracias es suficiente. Momentos como este nos llenan de muchas
reflexiones, nos invitan a reconcer nuestra individualidad, nuestra
independencia en busca de todo aquello que realmente nos hace feliz, y
son el conjunto de todas esas pequeñas cosas que van apareciendo en
nuestro día desde que sale el sol hasta que se va, identificarlo y
hacerlo parte de nuestra rutina, es el verdadero reto con el cual
nuestros días cobran sentido.
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